LA MARCHA FÚNEBRE A LA MUERTE DEL ILUSTRE GENERAL DON LEOPOLDO O’DONNELL
Los riosecanos han adoptado la expresión “La Lágrima” – por la emoción que suscita – para referirse a la pieza intitulada “A la Muerte del Ilustre General Don Leopoldo O’Donnell. Marcha Fúnebre”. Esta composición se interpreta cuando salen o entran los conjuntos escultóricos de “La Crucifixión” y “El Descendimiento” (conocidos como El Longinos y La Escalera, respectivamente) de la antigua capilla de la Cofradía Penitencial de la Quinta Angustia. El autor de esta marcha fúnebre es Enrique Arbós y Adami, músico militar nacido un 7 de marzo de 1.835 en Santiago de Compostela.
La composición fue “ejecutada el 10 de Noviembre de 1.867 en el entierro de S.E. por la Banda del Regimiento Infantería Inmemorial del Rey Nº1” según reza en la portada, por lo que la pieza se estrenó tan sólo cinco días más tarde de la muerte de D. Leopoldo O’Donnell (†05-11-1.867).
No tenemos datos de cuándo ni cómo llegó la obra a Medina de Rioseco.
A juzgar por los datos es probable que al director de la banda municipal Lupicinio Jiménez se le deba la inclusión de esta obra a principios del siglo XX cuando se le encarga traer en 1906 “cuatro marchas fúnebres nuevas”, la reiteración e interés por la misma de los siguientes directores: Francisco Morros, Pablo Magdaleno, Antonio Vallejo, etc., por interpretar la Marcha Fúnebre de O’Donnell a la salida de los “Pasos Grandes”, hicieron de la obra el emblema de la Semana Santa riosecana. Según los testimonios orales podríamos señalar que la composición ya era interpretada a la salida de estos pasos una década antes del estallido de la Guerra Civil.
La melodía inicial es muy conocida entre los cofrades riosecanos, es la siguiente:
La obra se hizo tan popular en la ciudad de Medina de Rioseco que incluso se entonaba cierta coplilla adecuada a la melodía antes expuesta que perdura a día de hoy.
La reiteración y hábito de asociar esta obra al evento posiblemente más espectacular e inquietante de la Semana Santa de Medina de Rioseco, la salida de los Pasos Grandes, se traduce a día de hoy en la exigencia de la perpetuidad de la misma de modo que la obra parece haber sido compuesta para la salida y/o recogida de estos conjuntos escultóricos.
De hecho, a lo largo del siglo XX se escribió una cadencia final (en modo mayor) para así no repetir prácticamente toda la composición; también se modificó el tempo con el fin de que el punto culminante de la composición coincidiese con el momento en que la Cruz del Longinos o el Brazo de Nicodemo comienzan a traspasar al dintel de la puerta del Salón de los Pasos Grandes, es decir, la pieza se ajustó al momento de la salida de los pasos.
A pesar de su popularidad en Medina de Rioseco, La Lágrima fue una composición cuya autoría permaneció en el anonimato durante un largo período de tiempo. Su hallazgo en la Biblioteca Nacional en 2008 devino en un específico estudio de la versión original, perdida hacía décadas y reconstruida a comienzos de los años 80.
La versión hallada (se trataba de la partitura original de 1867 para piano) fue enviada al Músico Mayor de la Banda del Regimentó Inmemorial: el profesor, director y compositor Enrique Blasco, actual director de la banda Guardia Real. Este reconocido músico, de forma desinteresada, se encargó de reconstruir la pieza orquestalmente sobre la versión primigenia restableciendo diversos aspectos que fueron modificados u olvidados cuando se procuró su reconstrucción a inicios de los años 80. Blasco, en un acertado trabajo, incluyó compases omitidos (ocho compases) enmendó algunas modificaciones rítmicas que habían sido cambiadas, rectificó aspectos armónicos (que también se habían modificado levemente) y escribió la obra en su tonalidad primigenia: Do menor. Meses después, La Lágrima fue reestrenada en la Iglesia de Santiago de los Caballeros de Medina de Rioseco el 28-03-2008 por la propia banda del Regimiento Inmemorial del Rey Nº1 bajo la dirección del propio Blasco.
STEMMA CAUDE | |||||||||
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Do m |
VERSIÓN ORIGINAL |
Enrique Arbós |
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05-11-1867 |
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Partitura para banda |
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Partitura para piano |
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Desaparecida |
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Madrid BN |
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(1910ca) |
Ya era conocida en Medina de Rioseco. |
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1906ca |
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VERSIÓN 0 |
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Do m |
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*Lupicinio Jiménez |
Desaparecida |
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Ignoramos si se aplicaron modificaciones |
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1926–72 (1951-71) |
Adaptación* Francisco Morros y/o *Pablo Magdaleno |
VERSIÓN 1 |
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La m |
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(1971-73) |
*Antonio Vallejo |
Leves modificaciones armónicas, rítmicas melódicas y de tonalidad. |
Modificación en el Final |
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1975 |
Antonio Gutiérrez |
Adaptación para banda de cornetas y tambores |
La m |
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1978ca |
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1981 |
Reconstruyen distintos músicos. Banda de San Quintín |
VERSIÓN 2 |
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Modificaciones armónicas rítmicas y melódicas |
Mismo Final Versión 1 |
La m |
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Omisión de 8 compases |
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28-03-2008 |
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VERSIÓN 3 |
Reconstruye Enrique Blasco |
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Do m |
Reconstrucción en base a la original de piano. |
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Final Versión 1. |
La Marcha Fúnebre al General O’Donnell es desde hace décadas el emblema de una gran parte de la comunidad riosecana, es una composición sentida como de propiedad colectiva. Posee un enorme valor simbólico y representativo y se encuentra muy difundida entre la comunidad a quien representa.